¿Porqué lo piden para realizar actividad física?
Todos los años al comenzar las clases comienzan a desfilar por los consultorios pediátricos madres, padres y niño/as o adolescentes en búsqueda del famoso «apto físico para hacer gimnasia».
En general, podemos pensar que los chicos no necesitan una evaluación demasiado profunda para realizar actividad física escolar o deportiva, que son sanos.
Sin embargo, es importante destacar, que ésa sea tal vez la única vez en el año en que un niño o un adolescente sea llevado a la consulta. Y ésa es precisamente la oportunidad de examinarlo, detectarle algo que ha pasado desapercibido, pedirle algún control de visión o audición si fuera necesario, revisar el carnet de vacunación, etc. Es decir, cumplir con el principio PREVENTIVO sobre el que se basa el ejercicio de la medicina: «mejor prevenir que curar», no?
¿Cómo desaprovechar esa valiosa oportunidad? Valiosa para el chico, los padres, el entorno y el médico comprometido con su función. Es importante hacerlo, de esa forma todos nos garantizamos que el niño al que conocemos está sano y que si hay algún control extra que hacer o una vacuna que aplicar, podemos hacerlo oportunamente.
Estas son las razones por las cuales sólo firmamos aptos médicos si hemos controlado al niño, la niña o adolescente en nuestro consultorio.